Ensimismado,
rascome los ojos bajo la melancolía,
no es con intensión dolorosa, sólo agonía
Es que traigo la carne expuesta
y desmembrados los huesos,
Oh Eros no me roas con miradas y silencio
Pues virtuoso yaces,
qué mortal me viste
devorado bajo tus delicadas plantas
Lanzadme un cabello de musa,
para convertirlo en verso vivo,
y así enamorar a mi amada
Y a vuestros oídos murmurarán tu grandeza,
"¡oh dulce seductor con lengua de poeta,
Eros se aloja rollizo en vuestro corazón!"
¡Pícaro! si mi causa
a su mirada se vuelve indigna
llevadme entonces como vuestra flecha,
Y en corazón ajeno
posare tus virtudes y mis desvelos,
más, si aún lo que declamo parece poco
Arrancadme este ruidoso
e impertinente hálito,
pues sólo eso puedo pedirte,
Para que venga a mi encuentro
mi dulce amada
Y yo ensangrentado disfrute
De su llanto como rocío,
y de sus caricias ultimas como brisa cálida,
en mi caminar hacia el Hades
Nemmesis Satory Anne Zednánreh
[Sólo un rojo y latente corazoncito]